El sector primario ha sido durante siglos el pilar fundamental de la economía en España de forma directa y de uno de los atractivos más relevantes que tenemos para atraer turismo; la alimentación. Sin embargo, a pesar de su crucial importancia, este sector ha permanecido durante largo tiempo inmutable a los avances tecnológicos que han revolucionado otras áreas. La ganadería, en particular, enfrenta desafíos diarios que demandan soluciones innovadoras. Ahora, en pleno siglo XXI, la digitalización emerge como el recurso más prometedor para hacer frente a estos retos.

Necesidad de modernizar la ganadería

La digitalización no es un lujo, sino una necesidad imperante. Las exigencias desde Europa para acceder a la PAC, los bajos márgenes de beneficio actuales y las subidas de los insumos han incrementado la presión sobre los ganaderos. El escenario actual exige una gestión más eficiente y precisa, donde cada recurso cuente y cada decisión impacte de manera positiva en la producción.

Una gestión optimizada

La digitalización ofrece herramientas que permiten la optimización de recursos en tiempo real. Con los sistemas de monitorización y seguimiento, los ganaderos pueden saber dónde están sus animales en todo momento, recibir alertas en caso de detectar algo inusual, detectar enfermedades de forma muy rápida para atajar el problema o que no se extienda a todo el rebaño o identificar patrones de comportamiento que permitan incrementar la rentabilidad de su explotación. De esta forma, además de

Tener datos para tomar decisiones mejores, más rápido y basadas en su propia ganadería, podrán ahorrar tiempo y costes como combustible de las visitas a las fincas donde están sus animales.

Una solución para todos

A menudo, cuando se habla de digitalización, surge la inquietud de si será accesible para todos o solo para grandes explotaciones. La realidad es que la tecnología actual permite desarrollar soluciones escalables, adaptadas a ganaderías de todos los tamaños. Una plataforma fácil e intuitiva, como la que IXORIGUE  propone, garantiza que cualquier ganadero, independientemente de su tamaño o recursos, pueda beneficiarse de las ventajas de la digitalización.

La tranquilidad de un control total

Uno de los beneficios más tangibles de la digitalización es la tranquilidad que ofrece al ganadero. Con sistemas automatizados de monitorización y alertas, los problemas pueden ser detectados y abordados rápidamente. El ganadero puede estar seguro de que su ganado está en las mejores condiciones, lo que se traduce en una mayor calidad de vida para los animales y una mejor producción.

 La digitalización del sector primario no es solo una tendencia, sino una respuesta a las necesidades actuales de la sociedad y del mercado. En el caso de la ganadería, las ventajas son claras: optimización de recursos, rentabilidad asegurada y una gestión más  eficiente.

 España, con su rica tradición ganadera, tiene una oportunidad única de liderar esta revolución digital, asegurando un futuro próspero y sostenible para el sector. Desde Ixorigue, nos comprometemos a ser parte activa de este cambio, ofreciendo soluciones que hagan la vida más sencilla a los ganaderos y garanticen el bienestar del ganado. Porque la ganadería del futuro es digital, y el futuro empieza hoy.