Tecnología y tradición se unen para recuperar la raza Mantequera Leonesa
La Mantequera Leonesa es una raza de vaca autóctona que vive en extensivo en las montañas y praderas de la provincia de León. Durante un tiempo, fue esencial en la economía de los pueblos al tener una gran producción lechera de alto contenido en grasas que les permitía elaborar mantequilla. Sin embargo, hoy se encuentra en peligro de extinción.
Por ello, estos rebaños vacunos se encuentran hoy dentro de un Plan de Mejora liderado por la Unidad de Mejora Genética de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León y el CENSYRA. Un proyecto que ha incluido la tecnología de Ixorigue para monitorizar estas ganaderías. A través de los collares GPS pueden identificar el estado de cada animal y la zona donde pastan. Una información esencial en el proceso de recuperación de esta raza autóctona.
¿Cómo es la vaca Mantequera Leonesa?
Esta vaca es conocida como “mantequera” porque su leche, rica en grasas, se utilizaba para elaborar mantequilla. Un producto que en el siglo XIX fue muy demandado a nivel nacional y que se comercializó de forma tradicional hasta principios del siglo XX.
La raza Mantequera Leonesa es un animal que, a día de hoy, vive en semi libertad y sigue pastando en zonas de especial valor medioambiental. Se caracteriza por ser de tamaño medio, por tener cuernos hacia fuera con las puntas ligeramente inclinadas hacía atrás, ser animales rústicos y su piel o capa es de color castaño.
¿Cuándo entró en peligro de extinción esta raza autóctona?
A principios del siglo XX existen censos que demuestran que había una población de 100.000 ejemplares repartidos entre la Sierra del Cuarel y Ancares en Lugo hasta el norte de Palencia y Burgos. Una amplia superficie que se consiguió por su potencial ganadero al ser una vaca adaptada a la orografía de la zona y por su uso industrial.
Sin embargo, a partir de los años 40 con la llegada de la industrialización láctea empezó el declive de la Mantequera Leonesa, al igual que pasó con otras razas lecheras. Esta vaca fue sustituida por razas foráneas como la Frisona y la Parda Alpina que tenían una mayor aptitud láctea.
Además, el precio de la mantequilla descendió al no poder competir con la margarina y el pago de la leche se empezó a hacer por litros sin importar su calidad y riqueza. Todo esto hizo que esta raza autóctona fuera desapareciendo de los montes y ganaderías leonesas.
¿Por qué es importante recuperar el patrimonio ganadero?
Recuperar una raza ganadera propia de un territorio supone tener animales adaptados a una climatología y orografía concreta capaces de vivir en altura (en el caso de la Mantequera Leonesa) con condiciones climáticas adversas y de pastar en zonas de difícil acceso.
Actualmente, estos rebaños contribuyen a mantener limpios los montes y praderas reduciendo la presencia de matorrales. Una labor medioambiental que Ixorigue apoya para conservar una ganadería con años de historia y para impulsar la riqueza medioambiental de los montes leoneses.